El mito de Progne y Filomela ha pasado a la historia como el estandarte revelador de la fuerza comunicativa del bordado. Mientras bordan en colectividad, las mujeres hablan, sus diálogos van quedando entre puntada y puntada; construyendo un reclamo de equidad en una sociedad patriarcal.
Como ya lo hizo Judy Chicago al reivindicar el tejido, bordado y costura, como técnicas artísticas; el colectivo Tejedoras Subversivas en Fuerteventura recupera éstas prácticas y materiales de lo doméstico, para trasladarlo a lo público; permitiendo así su visibilidad.
Si Kate Millet dio un paso adelante al afirmar que “El sexo es una categoría social impregnada de política”, el colectivo Tejedoras Subversivas en Fuerteventura enfundado en agujas, hilos y telas, aborda la fina línea que reivindica una nueva lectura a los actuales sistemas de valores patriarcales en contextos sociales, políticos y económicos.
El espacio artístico de esta propuesta pretende que sus participantes se piensen a nivel grupal, en voz de mujer, para favorecer así el empoderamiento colectivo. Al compartir poco a poco, las mujeres unen lo individual con lo grupal; permitiendo de este modo el fluir de pensamientos, palabras y emociones. Este acto de verse reflejada en otras mujeres es en gran medida terapéutico y empoderador.
Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que tejer, coser y bordar no son meras ocurrencias. Tanto en las manifestaciones de mujeres alrededor del mundo como en las piezas de Chicago y Amer, la técnica pasó de femenina a feminista, de lo privado a lo público, de un quehacer decorativo a una práctica artística.
El bordado y el tejido están revestidos de una utilidad trascendente: provocan placer cuando todo indica que deberíamos sufrir al realizarlos, ahí su potencia. Lo mismo con el feminismo, cuando deberíamos ser funcionales al patriarcado y al mercado, las mujeres nos organizamos para disfrutar y dar un vuelco epistémico a éstas técnicas ancestrales.
— Verónica Silva, comisaria de la exposición
Exposición colectiva Del tejido al bordado subversivo: una nueva mirada al arte textil
Comisariada por Verónica Silva
Casa de los Coroneles, del 7 de julio al 18 de septiembre de 2020
Inauguración: 13 de marzo a las 20.00
Artistas:
Verónica Silva (Manta, Ecuador, 1968).
Diplomada en Arquitectura de Interiores en la IADE de Madrid, realizó el Máster en Diseño Textil en Central St. Martins en Londres. Actualmente cursa el grado de Filosofía en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). Trabajó para la AECI Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) como técnica textil desarrollando nuevos diseños para veinte comunidades indígenas en Ecuador desde 1995 hasta el 2001.
Entre las diferentes exposiciones que ha realizado destacan Pas sans toi, en Galeriá Charabia (2000, Bruselas), Metáfora del Cuerpo, en Salón de Arte Contemporáneo Mariana Aguilera (2004, Quito, Ecuador), Aracné y Grafitejidos, en Galería Fundación Mapfre Guanarteme (2012, La Laguna, Tenerife), Las Penélopes, en Salón Creativa (2014, Madrid), El Sueño Exquisito, en Centro Cultural Joan Miró (2015, Madrid), Los Hilos de la Memoria, en Centro de Arte Metropolitano CAM (2018, Quito, Ecuador), Penélope teje su trama, en Auditorio de Puerto del Rosario (2018, Fuerteventura) y La Aguja Subversiva, en Casa Mané (2019, Fuerteventura).
Ha impartido ponencias sobre Diseño Artesanal en Ecuador, Colombia, Brasil y España – AECI, y ha colaborado con agencias de cooperación no gubernamentales en Ecuador para diversos proyectos artesanales.