Una fiesta es cualquier cosa excepto algo frívolo y superficial. Prepararla significa un esfuerzo. Hay algo profundo y primordial en ella: hacer una fiesta significa desatar una fuerza vital, una energía que se despliega creativamente después de unos días de trabajo. En plena 2ª Guerra Mundial, Simone de Beauvoir y sus amigos organizaban lo que llamaban fiestas como una manera de expresar la revancha de la vida sobre la muerte, de la libertad contra el servilismo, de la alegría contra la desesperanza. «Para mí, —escribe en La force de l’âge—, la fiesta es, ante todo una ardiente apoteosis del presente, frente a la inquietud del porvenir; un calmado fluir de días felices no suscita la fiesta; pero si en el fondo de la desgracia renace la esperanza (…) entonces el instante se pone a arder, podemos encerrarnos y consumirnos en él: es la fiesta.»
La fiesta es, además, un buen ejemplo de dos tesis existencialistas básicas: por un lado, las cosas no ‘son’ sino que ‘acontecen’ y por otro, en los humanos la existencia precede a la esencia.
En la exposición, La fiesta es para todos, el público podrá observar masas de personas, reuniones, celebraciones, espectadores, etc. Estos motivos se ajustan a una factura nueva en la obra de la artista, que hasta ahora se reconocía por la sobriedad de sus tonos grises, aplicando en su actual serie una mayor intensidad del color, con pinceladas cortas y segmentadas, ausencia de jerarquías entre figura y fondo y planitud dimensional. Estas decisiones de carácter formal han cristalizado en una temática no carente de actualidad en nuestro contexto social, insistiéndose más en la representación de la colectividad que en la del sujeto.
Moneiba Lemes hace uso de imágenes de actualidad política y las combina con escenas festivas, representando estados distintos de la colectividad que en unas ocasiones se muestra agitada como agente de cambio social y en otras en actitud pasiva o expectante. Las masas de personas, que han resultado tan peligrosas como emancipadoras, dependiendo de los diferentes episodios históricos, aparecen en «La fiesta es para todos» separadas del conflicto que las ha reunido.
La artista realiza un trabajo fundamentalmente pictórico, pero está muy ligado a la fotografía y el video. La producción de esta exposición ha sido realizada en Berlín, reside y trabaja entre esta ciudad y Las Palmas de Gran Canaria.
Nacida en Lanzarote en el año 1986, es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de La Laguna en el itinerario de Pensamiento y Prospectiva Cultural.
En el año 2009 estudia en la Hochschule für Bildende Künste de Braunschweig, en Alemania y en 2010 en la Universidad de Barcelona.
Desde 2007 ha trabajado como artista profesional en España y Alemania, resultado de ello es su participación en diversas exposiciones entre las que destacan: Archeology fabricated en la galería Junefirst de Berlín (2014); Artfetch Offline: New Art in Berlin en la galería GSL de Berlín (2014); Versos en la galería Manuel Ojeda de Las Palmas de Gran Canaria (2012). En cuanto a sus reconocimientos, obtuvo el Premio de Pintura Internacional Guasch Coranty en el Centro de Arte Tecla de Barcelona, en 2012.
Su trabajo es fundamentalmente pictórico, pero desde 2011 se apoya también en la fotografía y el video como medio de analizar las imágenes. Actualmente trabaja y vive entre Berlín y Las Palmas de Gran Canaria.